Por este principio me siento decepcionado ante las
acusaciones vertidas por la concejal de la alianza Cambiemos Susana Pérez,
figura nueva del quehacer político lugareño, que en el último tramo de este
vodevil en una nota aparecida en éste diario en el día de ayer, deja traslucir
en sus declaraciones una serie de aseveraciones temerarias por la falta de
consistencia y me hace pensar que cuando un fuero sirve para resguardar vilipendios
y falacias de quien lo detenta, desvirtúa la esencia misma de la democracia y
lo convierte en un privilegio vulgar y desdeñable.
Quiero si detenerme en algunas de esas afirmaciones por
sentirme involucrado en una gestión, anterior y actual que siempre volcó los
mayores esfuerzos en las áreas de Desarrollo Humano y Salud para asistir al que
no puede o tiene menos. Pergaminos que aunque quisiera no puede mostrar el
gobierno que representa la Concejal Pérez por ser el creador de convulsiones
impredecibles con noticias que por su contenido abrumador e indescifrable nos
lanzan a un sentimiento agudizado de intemperie.
En primer lugar si existen las pruebas que manifiesta tener
de estas practicas obscenas, que las haga conocer mas allá de una carta documento
o un fuero, aunque sea por oportunismo político por que si espera demasiado y
esta persuadida que la dignidad de la gente se compra con un bolsón de comida,
corre el riesgo de perder las próximas elecciones.
En segundo lugar rescatar de los últimos 10 años de gobierno
peronista, en Villaguay solo en estas practicas de asistencialismo coyuntural y
oportunista, y no reconocer un ápice del crecimiento exponencial que nuestra
ciudad ha experimentado en ésta década, por el hecho de ser oposición, muestra
desde lo patético, una nula capacidad de reflexión y análisis para la
construcción colectiva, trasuntada en cegueras mentales anunciatorias de
cócteles catastróficos. Ninguna construcción política se estructura solamente
en la crítica falaz y despiadada, las buenas ideas se corporizan a favor de
algo y no en contra de algo. Por último la parte final del articulo denominado
"chirlo político" no resiste un análisis porque al decir de los
hombres del derecho "a confesión de partes, relevo de pruebas".
De allí que estas
actitudes mas que en el plano de lo político en comunidades como la nuestra
donde todos nos conocemos y es fácil comprobar lo que se dice, se pierden en
los laberintos de un sentimiento desconocido y adverso que pretende disimilar
desde esa pequeña porción de poder que veces se detenta mas atribuible a la
perplejidad de estos tiempos que a la decisión minoritaria de su gente.
Dijo un pensador que la historia se da dos veces, la primera
como tragedia y la segunda como comedia, pero esta versión de lo hechos se
enmarca en la lógica del vodevil y del grotesco, demasiado paupérrimo para
construir es preferible volcar la fuerza de esta intencionalidad para elaborar
otro derrotero con proyectos serios de cara a la solución de la problemática
cotidiana y de esta forma entrar en la
consideración de sus copoblanos porque sin este necesario ejercicio es como
tener una empresa de demoliciones y luego no saber que hacer con los escombros.
Un ciudadano común, con nombre y apellido.
Manuel Servando Esquivel
8.416.021
Más sobre este tema:
0 Comentarios