"Me voy a mandar una cagada", avisó el policía que terminó matando a su hija

Un policía de Neuquén asesinó a su hija de diez años y luego se suicidó en la pequeña localidad de Piedra del Aguila. El cabo primero Omar Inalaf (31) disparó contra de su hija Milagros y contra sí mismo con su arma reglamentaria por motivos que todavía no están esclarecidos.


El policía de tránsito y la menor fueron encontrados, en la noche del jueves, alrededor de las 22, por agentes de seguridad, en el sillón de la casa que el hombre alquilaba en Piedra del Aguila. Ambos permanecían con vida pero en grave estado y fallecieron poco después en el hospital local.

Inalaf estaba en trámite de separación de su pareja. Según familiares, el rompimiento del vínculo era algo definitivo y les quedaba resolver la cuestión de los bienes. El policía habría estado atravesando una crisis sentimental al momento de desatar la tragedia.

El suegro de Inalaf fue el primero en entender que algo dramático podía ocurrir. Al parecer, el suicida dejó escapar ayer, en el transcurso de una charla por chat en Facebook, una frase premonitoria: “me voy a mandar una cagada”. La afirmación llegó a oídos del suegro, que llamó a la Policía del lugar para denunciar la conducta preocupante de Inalaf. Los agentes acudieron a la casa ubicada en la calle David Zapata al 100 donde, después de golpear en varias ocasiones la puerta, decidieron forzarla. Al entrar descubrieron los cuerpos fatalmente heridos tirados en el sillón.

Los dos yacían sobre el sofá apenas con vida. Aunque fueron trasladados de inmediato al hospital de Piedra del Aguila, murieron a consecuencia de los impactos de bala.

La separación matrimonial pudo ser el desencadenante de la tragedia, se especula. “Tenemos conocimiento que hace unos días atrás habían terminado la relación. Había trascendido que estaban haciendo la separación de bienes”, le indicó a LU5, el superintendente de Seguridad de la provincia, Miguel Cuadrado. Inalaf y esposa se habían casado el 21 de julio de 2013.

“Por una cuestión de respeto, no hemos entrevistado a la señora. Hoy vamos a trabajar con todo el equipo psicosocial de la Policía”, explicó Cuadrado.

Inalaf era nacido y criado en la localidad. En la fuerza se lo conocía como un policía ejemplar. Era un ser humano reservado y que no compartía sus asuntos personales con otras personas, recuerdan. "Sus cuestiones íntimas no las comentaba ni siquiera con sus compañeros”, amplió el superior. No había protagonizado antes situaciones de violencia familiar o social.

Piedra del Aguila es una localidad neuquina ubicada a 200 kilómetros de Bariloche y a 230 de Neuquén capital. Tiene alrededor de 5.000 habitantes. Debido a su cercanía con el río Limay, es conocida como un importante centro de pesca deportiva. (Fuente: Clarín).

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