Los problemas en Vialidad, ¿una interna gremial?

El estado de los caminos secundarios y terciarios de la provincia, llamados comúnmente "de la producción" han sido objeto de polémica en los últimos días. Luego de que se viralizara un video donde un productor de Nogoyá arrojaba miles de litros de leche por no poder transportarla, las entidades rurales golpearon fuerte a la Dirección Provincial de Vialidad -DPV- que argumentó cuestiones vinculadas a lo climático e indicó que se trabaja en todos los frentes.

Pero el tema de fondo, que sobrevoló en las declaraciones de los integrantes de las entidades del campo, hablan de algo más, que bien podría interpretarse en el marco de la disputa sindical. La actual directora del organismo provincial es Alicia Feltes, quien reemplazó a Juan Carlos Lallana, titular del Sindicato de Obreros y Empleados Viales de Entre Ríos -Soever-. Al momento de volver a la actividad gremial, luego de su apartamiento, Lallana sentenció: "Lamento que de aquí en adelante no sea un trabajador vial el que venga a la Dirección Provincial de Vialidad".

¿Existe una interna en Vialidad que dificulta los trabajos? ¿Hay intenciones de generar un 'vacío' en la gestión de Feltes para que la Dirección no trabaje de manera adecuada? A continuación algunos lineamientos, de la mano de varios actores vinculados al tema.



Elvio Guía, dirigente de la Federación Agraria -FAA- de Entre Ríos sostuvo hace pocos días, en diálogo con el Nueve, que a la hora de los arreglos "hay voluntad de dos o tres funcionarios, pero luego el propio sistema los tritura". Y agregó: "No vemos la voluntad de muchos de los jefes zonales, de los mismos empleados, sí hay algunos que trabajan bien, pero hoy no funciona Vialidad en su conjunto".

Por su parte Daniel Koch, diputado provincial del Frente Renovador, aseguró que sí existió anteriormente una interna sindical, que tuvo graves consecuencias, sobre todo en el departamento Nogoyá: "Fueron veinte años de disputa y de desidia. Por eso desde que volvió la democracia se hicieron sólo ocho kilómetros de caminos en esa zona. Lo de Feltes es meritorio, pero no es fácil llevar adelante la Dirección".

Para el legislador los problemas dentro de Soever han menoscabado la responsabilidad de algunos empleados de la DPV a la hora de ejecutar obras: "Yo creo en los derechos de los trabajadores, pero ellos deben a su vez pensar en los demás. Cuando no se hacen caminos por mezquindades se deja a personas sin poder ir a trabajar y a chicos sin poder ir a la escuela. No se puede decidir así sobre la vida de los demás".

Koch está seguro de que hacen falta al menos 20 máquinas que trabajen un mes completo para resolver la situación de las rutas de la producción en el departamento: "Hoy sólo hay cinco. A eso se le suman 160 alcantarillas tapadas, 40 rotas, 10 calzadas que no se pueden usar, cuatro puentes en deterioro. A eso le sumamos que los camiones cargan el doble de peso que hace 30 años, que la absorción de los campos es mucho menor que antes, por la siembra directa y los fertilizantes, y que el agua de las lluvias ahora va directo a los caminos".

Desde Soever el que habló fue su titular, Juan Carlos Lallana. Desmintió cualquier tipo de enfrentamiento que hoy perjudique los trabajos de la DPV: "Para nada es así. Los trabajadores viales son los que mantienen la Dirección. El tema gremial se va a dirimir el año que viene, no se van a paralizar las obras por eso, porque hay muchísimo compromiso".

Si bien evitó hablar de Feltes, el extitular del organismo sí opinó por qué hoy se dificulta cumplir con las obligaciones que se le imponen a la DPV: "El problema pasa por la falta de financiamiento. Hoy todo se hace con plata de la provincia, entonces es muy difícil. Pero una cosa con la otra no tiene nada que ver. Lo más importante es la Dirección, y queremos que cada vez trabaje mejor. El empleado vial lo sabe y entiende que lo importante es optimizar el servicio".

Sin embargo un antecedente cercano podría ir a contramano de lo expresado por Lallana. En un comunicado emitido en abril de este año, luego de un plenario de secretarios ejecutivos de la entidad, la dirigencia gremial criticó a la nueva administración, manifestando su "preocupación" por las decisiones de las nuevas autoridades y remarcando que la nueva forma de conducción "paraliza las capacidades operativas de las zonales".

En Vialidad, en tanto, creen que nada de lo que se habla es cierto. Néstor Kemerer, director Sub Administrador del organismo, sostuvo que "el trabajador vial tiene buena predisposición" y negó que problemas sindicales paren las obras: "Estamos trabajando en todos los frentes, incluso los fines de semana. Lo descartamos totalmente". Para cerrar, el funcionario lanzó una frase que va en consonancia con lo argumentado desde el gremio: "El trabajador sabe cuál es la situación política, pero entiende la importancia de dar un buen servicio, ante todo".

En las últimas horas un comunicado de la agrupación Viales Unidos destacó el "compromiso y la predisposición de los trabajadores de la Dirección Provincial de Vialidad para llevar adelante tareas de conservación de caminos secundarios y terciarios más allá de los días y horarios laborales". Asimismo criticaron duramente la participación del Gobierno Nacional en las obras. (Fuente: Ahora).

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