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Estaba embarazada y su novio la apuñaló: tuvieron que hacerle una cesárea de urgencia


Una joven embarazada fue apuñalada por su novio en las últimas horas en un nuevo caso de violencia de género. Como consecuencia del ataque, a la mujer debieron practicarle una cesárea de urgencia. Tanto ella como su hija se encuentran en terapia intensiva en dos hospitales de la ciudad de Córdoba.
El hecho ocurrió durante la madrugada del 1 de enero, después de los festejos de Año Nuevo, cuando Alexis Cuello, de 25 años, atacó con un cuchillo tipo tramontina a Camila Márquez, de 21, y le provocó una importante herida entre el pecho y el abdomen.

La chica, embarazada de 27 semanas, fue asistida en un primer momento por sus vecinos del barrio Juan Pablo II de la capital cordobesa y luego trasladada al hospital Materno Neonatal Dr. Ramón Carrillo, donde le practicaron una cesárea de urgencia.

"La beba estaba sufriendo dentro del útero. De no haberle practicado la cesárea, no hubiera sobrevivido. Se la reanimó y se le dio todo lo que requiere un prematuro de esas características con inmadurez de sus órganos. Está con asistencia respiratoria y, dentro de lo crítico del cuadro, está estable", explicó a medios cordobeses la directora del hospital Carrillo, Liliana Asís.

La bebé nació con 1,140 kilo y se espera que, cuando alcance los dos kilos y el tiempo equivalente al de una gestación a término (36 semanas), pueda recibir el alta médica.

Tras dar a luz, la madre fue derivada al hospital Misericordia de la misma ciudad, donde se encuentra "en terapia intensiva, con asistencia respiratoria mecánica, pero estable". Así lo aseguró el director del hospital, Fernando Ulloque.

"Sufrió una lesión epigástrica y un hemoneumotórax producto de la lesión con el cuchillo, (que) no complicó órganos abdominales, y eso favorece el pronóstico. Por el momento, la estamos evaluando para ver cuándo podemos empezar a retirar la sedación y la asistencia respiratoria", señaló Ulloque.

El agresor, en tanto, fue detenido por la Policía después del ataque, que se produjo a pocos metros de su vivienda del lote 23, manzana 105, del barrio Juan Pablo II. La fiscal Betina Croppi, a cargo de la causa, lo imputó por homicidio calificado por el vínculo y por violencia de género en grado de tentativa. “No tenemos por el momento un antecedente de denuncia por violencia. Pero sí refieren personas allegadas que había habido otros hechos de violencia no denunciados”, aclaró Croppi. (Fuente: Clarín).

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