NO TODAS LAS ESCLAVAS CORRIERON LA MISMA SUERTE. Por Manuela Chiesa de Mammana (*)

"El censo de 1848 arroja una esclava en cada una de las casas más representativas de Villaguay" (Foto ilustrativa).

En la década de 1820-1830, todavía la compra y venta de esclavos figuraba en los periódicos.

Fueron carne de cañón en las luchas civiles, en Montevideo con Oribe y en Entre Ríos con Urquiza. Los hombres marchaban a la guerra, las mujeres eran vendidas a buen precio como amas de cría irremplazables, o como excelentes lavanderas o planchadoras

     En agosto de 1823, don Domingo Moreyra, poco tiempo atrás comandante de Lucas, pactó con doña Justa Britos la compra de una esclava de nombre María, con dos niños de dos y tres años para su estancia de Paso de la Laguna. El precio de $ 250 permitió que María no se separara de sus dos pequeños hijos. Sin embargo no todas corrieron la misma suerte.

     El 10 de noviembre de 1824, Camilo Idoate le escribe al Gobernador León Sola diciéndole:

     "En oficio anterior consulte a V. S. si podía bajar el precio de la venta de la parda Toribia, esclava de don Manuel Antonio Troncoso, quien pide por ella $ 300, libres de escritura y alcábala, a pesar de que ya le ha servido ocho años. Es de edad madura y padece una enfermedad habitual peligrosa. A todo lo cual se agrega que la ha conminado su amo que si no halla quien la compre, la ha de castigar severamente.

     "En visto de lo expuesto dígnese, V. E. declarar si puedo o no, bajar el precio referido con arreglo a lo que en el día valen los esclavos para terminar la solicitud de esta infeliz".

     Es conocida la desprotección de los esclavos, aceptada como regla de juego en aquella época. Hay numerosos ejemplos de mujeres esclavas que corrieron suertes diversas en Entre Ríos.

Sin embargo también es destacable, que en alguna oportunidad, sus amos recurrieron a los jefes políticos para recuperarlas y reintegrarlas a sus familias.

     El censo de 1848 arroja una esclava en cada una de las casas más representativas de Villaguay.


(*) Este texto forma parte de una serie de artículos sobre las mujeres que intervinieron en episodios fundamentales de la historia de Villaguay y otras zonas de Entre Ríos.

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