La tragedia vial ocurrida el 7 de agosto de 2017 en la ruta nacional 18, cerca de Viale, provocó una herida de por vida para el conductor del auto que se incrustó contra la columna de un puente. Su esposa murió en el acto y su hija e hijastras resultaron heridas.La imputación penal por la imprudencia cometida al volante dejó de tener sentido. La Fiscalía y la defensa coincidieron en que cualquier condena que se le impusiera resultaría en un “doble castigo” para el hombre, quien además de perder a su esposa, sufrió el distanciamiento de las dos niñas que son hijas de la víctima fatal.
El fiscal Juan Malvasio y la defensora oficial Antonella Manfredi presentaron el acuerdo de sobreseimiento de J.F.A., quien estaba acusado por el delito de Homicidio culposo y Lesiones graves culposas.
El hecho ocurrió a la 1.30, cuando el auto Fiat Uno transitaba por la ruta 18, y a la altura del kilómetro 39, antes de llegar al puente que cruza el arroyo Torillo, el conductor perdió el control del vehículo e impactó en su parte frontal delantera derecha contra una columna de hormigón del puente.
Como consecuencia de la colisión, se produjo el deceso de su esposa. La hija del conductor, de 5 años, sufrió traumatismo de cráneo moderado, una de las hijas de la fallecida, de 15, padeció un traumatismo de cráneo grave con fractura maxilar, y otra varios golpes severos en el cuerpo.
Según lo planteado por la defensora en su requerimiento, “todo ello le generó (a J.F.A.) un severo daño moral y espiritual equiparable al que pudiera causarle una sanción penal conminada en abstracto para el delito que se le atribuye, es decir, que se encuentra padeciendo una pena natural por el hecho que se le ha imputado”, publica El Día.
0 Comentarios