Un camión perteneciente a una empresa de Paraná sufrió un accidente este miércoles al esquivar una moto en San Juan. Poco después, un grupo de personas se agolpó en el lugar y se llevó 22 mil kilos de carne que estaba en el vehículo.
Antonio Parra, el dueño del frigorífico sanjuanino que había contratado el servicio del transporte paranaense, admitió que autorizó la entrega de todas las medias reses a la gran cantidad de personas que se agolparon a la caja térmica.
Parra realizó la aclaración luego de que circularan una serie de fotos y videos de un grupo de vecinos llevándose las reses caminando, en moto o en el techo de un Fiat 600.
El empresario contó que las reses fueron puestas a disposición de los que aguardaban para llevarse lo que pudieran. “Desde Bromatología determinaron que no se podía comercializar y decidimos darlo” dijo.
Parra detalló que desde que se enteró que el camión que llegaba de Entre Ríos a su negocio había volcado, se comunicó con el departamento de Bromatología para que estudiara las condiciones de la carne. Además añadió que desde un primer momento se supo que las reses no se iban a poder comercializar porque en el lugar en donde cayeron había polvillo en suspensión.
“La gente esperó hasta que se autorizó a que sacaran, solo le pedimos que fueran ordenados, ya que había suficiente carne para todos” explicó. Los vecinos de la zona no dudaron ni un minuto y se llevaron entre 22 y 24 mil kilos de carne, es decir medio millón de pesos, que en un primer momento iban a ser dejados en el ex Parque Faunístico de Rivadavia.
A pesar de la pérdida de la carne y lo que representa económicamente, será la aseguradora del transporte quien enfrentará el cargo económico.
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