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Básquet. EL BASE JUAN AGUIRRE (BANCARIO) ANALIZA LOS PRIMEROS JUEGOS DISPUTADOS ANTE LUIS LUCIANO EN SEMIFINALES


Como ocurrió con la totalidad de las actividades deportivas en el país y en todo el mundo, las semifinales de la Liga Provincial de Mayores quedaron en “stand by” debido a esta pandemia de coronavirus. El Centro Bancario de Gualeguay había dado el gran golpe en una de las eliminatorias, nada menos que ante el N° 1 de la fase regular, Luis Luciano, al ganarle el segundo partido como visitante en Urdinarrain, cambiando “el factor localía”. Uno de los jugadores más importantes en la estructura del equipo “gualeyo” dirigido por Román Nuñez es el santafesino Juan Daniel Aguirre. El base de 29 años oriundo de Reconquista expuso sus sensaciones ante el obligado parate debido al COVID-19, habló de los dos choques iniciales y de lo que viene en esta tremenda eliminatoria ante Luciano.

- ¿Cómo están viviendo la cuarentena en Bancario? ¿Llevan adelante rutinas de entrenamientos cada uno de los jugadores en sus casas?
- Ahora se tranquilizó un poco el tema. Sinceramente estábamos todos muy preocupados, los jugadores, los dirigentes y la gente del club. Sabíamos que hubo en caso en Gualeguay pero no teníamos que alarmarnos demasiado porque nos íbamos a volver locos. Hicimos un planteo entre los jugadores y sinceramente me salió a mí decirlo. Arranqué tomando la palabra con un mensaje de texto porque yo ya me había venido para Reconquista y les dije a los chicos que si nos podíamos poner de acuerdo (antes de que suspendan la competencia) solicitando si era posible detener los entrenamientos porque la verdad en lo personal me daba mucho miedo viajar, ya que me tengo que tomar tres colectivos desde Reconquista para llegar a Gualeguay. 


- Y el hecho de estar lejos de la familia en un momento de reclusión como éste…
- La verdad es que no estaba muy cómodo con este tema, me daba mucho miedo y decidí quedarme en mi casa. Se lo comuniqué al entrenador, después hablé con los dirigentes. Ellos hicieron una reunión, después empezaron a salir todas las noticias sobre el coronavirus y a partir de allí suspendieron las prácticas. Creo que fue la mejor decisión que pudieron tomar. Ahora se bajó un poco la tensión pero estábamos muy preocupados. Hay que tener paciencia, hacer los trabajos que nos dieron para realizar en casa y no desenfocarse porque justo estamos a un paso de la final, pero lo primero es la salud de todos. Estuvimos unos días entrenando por la mañana y también de noche. La verdad es que no sé si practicamos bien ya que cada uno de nosotros tenía en la cabeza puesta en la familia, porque ya se sabía que no se iba a jugar el partido del viernes posterior. Todos queríamos viajar a nuestras casas por las dudas se corte el transporte público. Hay tres jugadores que somos de más lejos y teníamos mucha incertidumbre con respecto a eso.

- ¿Qué balance hicieron de los dos primeros juegos de las semifinales ante Luciano?

- Sabíamos que era un rival difícil, más que ellos disponían de la localía, pero también tenemos en claro que habíamos podido ganar de visitante y fuimos el único equipo que le ganó a Luciano en esa condición. Empezamos la serie con toda la cabeza puesta en que podíamos conseguir la victoria y con la tranquilidad necesaria para afrontar una instancia tan relevante. Habíamos hablado que “robarle” uno de los dos juegos iba a ser algo fundamental para tener chances de llegar al final con expectativas, ya que el 0-2 abajo es muy difícil. El primer partido lo podríamos haber ganado y se nos escapó por la gran cantidad de pérdidas que tuvimos. Pero el domingo jugamos un partidazo, hicimos las cosas muy bien, nos pasamos perfecto la pelota porque teníamos claro que la ventaja estaba en el poste bajo. Gracias a Dios nos pudimos llevar ese partido. El equipo está muy bien acoplado, cada uno sabe lo que tiene que hacer y el rol que debe cumplir adentro de la cancha. Debemos estar tranquilos y después de pasar este tema del coronavirus, tratar de definirlo en casa en estos dos partidos que se nos vienen. Estamos muy contentos por la producción del equipo.

- ¿Qué aspectos del juego deben afianzar o mejorar para lo que viene de la serie? ¿Por dónde pensás que pasarán las claves de los próximos encuentros?

- Creo que las claves pasarán por las penetraciones y las descargas, dado que a ellos les cuesta mucho defender el “uno contra uno”. También en determinados pasajes del juego debemos poner la pelota en el poste bajo, ya que ahí arranca nuestro juego. Contamos con dos buenos jugadores en la zona pintada como Lahuel Silva y Mariano Ortega (Nota de la Redacción: Oriundo de Villaguay) y confiamos mucho en ellos. La imprevista baja de Pablo Pastori, quien por razones laborales dejó la institución antes de las semifinales, nos fortaleció y a decir verdad, no se ha notado su ausencia. Tenemos que corregir mucho las pérdidas de pelota, ya que tuvimos demasiadas en el primer partido (fueron cerca de 20) y a pesar de eso terminamos perdiendo sólo por cinco puntos. También tenemos que correr un poco más la cancha, ya que hay momentos que lo hacemos muy bien y otros en los que fallamos en ese aspecto.

- ¿En lo personal cómo te has sentido a lo largo de la temporada?

- Sinceramente muy bien. Me encontré con un grupo de trabajo muy bueno adentro y fuera de la cancha y con jugadores de gran nivel. Sólo conocía a Pastori, ya que había jugado con él en Talleres (Paraná). La comunión del grupo fuera de la cancha es muy importante, diría que es el 70% del éxito. También hay muy buena gente en el club Bancario: Los dirigentes, los que nos cocinan, Román (Núñez) y el cuerpo técnico, los preparadores físicos. Estoy muy agradecido a todos porque me han tratado de la mejor manera. Además la ciudad de Gualeguay es muy linda, tranquila y estoy muy a gusto. En la provincia de Entre Ríos, solamente conocía Paraná.

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